Hacía siglos que no pensaba en mi época del colegio. Conservo buenas amigas de aquellos tiempos, pero supongo que el hecho de haberme marchado de la ciudad donde pasé mi etapa escolar hace ya casi dos décadas ha motivado que no haya tenido muy presente a mucha de la gente con la que compartí pupitre, risas, castigos, carreras por los pasillos, aprobados y suspensos, excursiones y muchas más cosas que habían pasado a ese lado de la memoria que piensas olvidado.
Hace unas semanas se abrió un grupo en Facebook para organizar una comida de mi promoción de aquella época. Es increíble como en unos días el grupo se ha llenado de recuerdos, de fotos, de anécdotas… de risas, muchas risas. Y paseando por el grupo han vuelto a mi cabeza mil y una historias.
No cambiaría el presente por el pasado pero es bonito recordar cuando éramos niños, cuando la mayor preocupación era que tus padres no se enteraran que te habían tirado de clase por liarla parda, cuando lo más de lo más eran esos pantalones pesqueros, esos chaquetones de colores imposibles… Un tiempo donde el bocata de atún con tomate (mítico en mi cole) era el más preciado manjar, donde los “toi” (toi cabreao, toi ligando, toi chungo…) eran motivo de risas, donde escuchar a SABRINA (y su espontanea actuación en la Nochevieja del 88), Eros Ramazzotti o a los Bros te hacía vibrar… por no hablar de la Supe Pop (RIP), de Verano Azul o de Alf, de los casetes, de Mazinger Z o de las muñecas Repollo, del Magia Borrás, el Quimicefa o los Juegos Reunidos…
Hay memorias prodigiosas que recuerdan detalles realmente curiosos y divertidos, me ha encantado este reencuentro virtual previo a la comida donde muchos volveremos a vernos después de 20 años.
¿Habéis asistido a “eventos” revival de vuestra época del colegio? ¿Os gustaría? ¿Qué opináis de ellos?
A mí también me llegó una invitación de un grupo facebook de mi cole. Cuando quise aceptarla, no me dejó. Luego mandé yo una petición de amistad. Y quien lleva el grupo no pudo agregarme. Y así seguimos. Mi pasado no me acepta.
Me gustaMe gusta
Chelo, nosotros empezamos reuniéndonos a los 25 años de dejar el colegio. No había facebook, pero conseguimos ir casi todos. Fue la reunión más «traumática», pues poco se parece un chaval de 17 años a un hombre de 42. Casi (o sin casi) teníamos que ir con nuestro nombre escrito en una pegatina para reconocernos (menos algún jodío por el que no pasan los años 🙂 Desde entonces nos reunimos, o procuramos hacerlo, una vez cada año. Así vamos asistiendo a nuestro deterioro, ya sin necesidad de pegatinas. Son reuniones muy gratificantes en las que todos rejuvenecemos recordando nuestra época escolar, dejando por un día los achaques personales de cada cual.
Me gustaMe gusta
Me váis a decir que soy lo peor, pero esta nostalgia por el colegio y el instituto no me ha afectado nunca, no siento nada especial al remememorar esa época, si acaso ciertos momentos con ciertas personas, lo que aprendí con cierto profesor, poco más… Fueron experiencias muy positivas y conservo a las personas que he decidido conservar de cada uno de los momentos, pero ya está, es pasado, y recrearse en ello no me interesa. Si he perdido el contacto con la mayoría de personas será por algo así que forzar un encuentro y un volver a hablar me resulta tedioso. Aparte, yo soy de natural tímida y sé que lo pasaría fatal, estaría sobreactuada y sería vivir un mal rato, así que yo ni me planteo acudir a un encuentro de este estilo
Me gustaMe gusta
TC, Arantxa, Isa, seguro que no me arrepiento!! Gracias por vuestros comentarios ¿alguna anécdota reseñable? ;-))))
He editado el post para añadir a Sabrina, cómo se me había podido pasar!!! Gracias Lito por recordármelo.
Me gustaMe gusta
El encuentro con la gente del cole fue en mayo de 2009, gracias a Facebook. Yo sólo llevaba unos meses en la red de redes y empezaron a aparecer mis ex-compañeros, como si tal cosa, cosas de Facebook. Lo pasamos bien aquella noche y el buen tiempo acompañaba. Hubo muy buen rollo. Después de esa primera quedada hubo otras, aunque yo sólo acudí a una segunda. El tema ha quedado un poco estancado, pasado el frenesí inicial.
Si te reencuentras a los 33 años con gente a la que no ves desde que acabaste COU el impacto es fuerte. Algunos casados, con críos, otros no. Incluso físicamente me chocó, había gente por la que los años no parecían haber pasado y al revés.
Lo pasarás muy bien en la cena.
Me gustaMe gusta
Yo me reencontré con mis amigos del cole vía Facebook hace ya casi dos años y me encantó la experiencia: Recordar viejos tiempos con adultos consagrados a los que les encantó ser niños de nuevo 🙂
A la mayoría de ellos no los veía desde hacía casi 20 años. Nos separamos cuando no había ni móviles, ni mails, ni Internet… y mucho menos whatsapp y Twitter. En ese sentido, las redes sociales han supuesto una revolución.
Disfruta del momento… el hoy es lo que importa, pero mirar atrás y que te guste lo que ves mola. Y mucho.
Me gustaMe gusta
Uff, menuda etapa! Yo fuí muy feliz en mi niñez y mi adolescencia, y recuerdo con mucho cariño aquella epoca.
Hace un año, me invitaron a una cena de gente del colegio. Un grupo de gente (cada vez más numeroso) se encarga de organizar una cena una vez al año. A mi me localizaron y asistí. Al principio, he decir que me daba cierto reparo asistir, soy de naturaleza tímida, pero me insistieron, y tengo que decir que me alegro enormemente de haber ido.
Pese a lo que podía pasarse por mi cabeza respecto de este tipo de cenas, me equivoqué totalmente, encontré gente estupenda. Gente con la que hacia 20 años que no coincidía, y sin embargo, fue como siguieramos en el colegio. Anecdotas que se encadenaban unas con otras, y dolor de mandíbula de tanto reir. Gente, sobre todo sana, de buen rollo, y con único proposito de pasarlo bien, y reencontrarse. Con la que está cayendo, y con todo lo que todos tenemos encima, a veces hace falta permitirse respirar y coger fuerzas.
Yo desde luego, a la próxima cena, me apunto de nuevo. Seguro que tu tambien repetiras, ya me lo contaras.
Me gustaMe gusta