Con la edad se producen muchos retrocesos paradójicos. Uno de ellos es la de volver a la etapa de “revisiones porsiaca”. Lo que viene siendo la ITV humana en edad adulta (¿ITHEA?). Es como volver en el tiempo a las “revisiones del niño sano” pero con un puñado de años más. A los críos hay que llevaros al médico según calendario pre establecido, a que los midan, los pesen, les revisen los dientes… y cuando te haces “mayor” pasa algo parecido. Ginecólogo, dermatólogo, oftalmólogo, dentista son los más comunes del calendario, pero luego cada uno tenemos lo nuestro. Y todo eso, estando razonablemente sano.
No me gusta ir al médico, retraso al límite mis revisiones, tardo meses en recoger resultados de las pruebas rutinarias que me mandan, me aguanto el dolor de esa muela semanas por no ir al dentista… pero al final acabo yendo, tarde, pero voy. No conozco a mucha gente que le guste ir al médico, de hecho, creo que no conozco a nadie, pero acaba siendo un “mal” necesario.
A veces hablo con gente “de mi quinta” que lleva años sin ir a una revisión de nada y están tan ricamente. Me pregunto si yo soy un poco hipocondriaca. ¿Tú de que bando eres? ¿Te revisas o pasas?
im-perfectas.com 
Soy algo hipocondríaca y al contrario que a la mayoría de la gente no me da miedo el médico, ni las pruebas. Si se padece algo, un diagnóstico precoz es lo mejor para luchar contra lo que sea. No disfruto con las pruebas médicas, pero la revisión ginecológica anual es obligada, igual que la visita al dentista. Es curioso que esta última la eluda mucha gente.
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Mi revisión Ginecologica es inaludible. Me muero de miedo pensando que podria pasar (conozco muchos casos) si no se coge a tiempo. El resto de medicos, en funcion de como me sienta, no me importa ir al medico, pero me da pereza… Al ginecologo ni me lo planteo. Es obligatorio!
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Esa otra, cuando vas y sales igual (de fastidiado)…
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Me da una pereza tremenda ir al médico, y las revisiones anuales me las salto a la torera… sé que más vale prevenir y curar. Tengo interiorizado el mensaje. Pero lo cierto es que solo voy al médico si me encuentro mal, y aún así no siempre me solucionan el problema.
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A mi a veces me han mandado pruebas que he dilatado tanto que se me han juntado con la revisión del año siguiente O_O
Saludos Mi Alter Ego!
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Jeje, lo de la solidaridad médica es totalmente cierto Diego!
Un saludo!
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Yo me reviso una vez al año y tan ricamente, oye. Es un peñazo pero todo es armarse de valor un día y quitarse el problema hasta el año siguiente. Un besote!!!
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Cuando trabajaba, en las empresas en las que trabajé siempre hacían revisiones anuales. Ahora, ya jubilado, sólo visito a los «ólogos» en caso de necesidad. Lo malo es que el ólogo visitado siempre te encuentra algo además de lo suyo y te envía a otro ólogo. La solidaridad médica 🙂
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¿Eso quiere decir que llevas años sin ponerte malo? Qué salud! ¿ni una contractura ni ná de ná?
Bueno, mirarse el colesterol y esas cosas no viene mal de vez en cuando, como dice Carol, sin pasarse 🙂
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La revisión anual con el ginecólogo junto con la del dentista son las que peor llevo…
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Por no tener, no tengo ni médico ni sé qué centro de salud me toca. Así que imagínate cuando pasé la última revisión.
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Mis abuelas, como casi todas las de la época, no pisaron un ginecólogo en toda su vida… pero no creo que sea un buen consejo a seguir, por muy desagradable que sea la visita 😉 Yo digo: revisiones sí, sin paranoias ni hipocondrias.
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