Abandono. Lo tengo decidido. Ya nadie me apea del burro y eso que lo han intentado, tanto, que es prácticamente imposible no sentir sobre mi cogote el peso social de la culpa. La sensación de deserción es mayor que la de la primera vez que dejé un libro a medias… y esa congoja intermitente de saber que te estás rindiendo, cuando otras muchas lo consiguieron contra viento y marea, capeando el temporal como heroínas.
Antes de que llegase la hora de la verdad, ni siquiera me lo había planteado. Te dicen que es lo mejor y, por supuesto, te dices que sí, que lo vas a hacer… (¿Cómo no voy a hacerlo si es lo mejor?). Nadie te pone realmente en antecedentes. Hay una especie de ocultismo vergonzante al respecto. Ni libros, ni artículos, ni foros sacan a relucir todos los inconvenientes y dificultades que te puedes encontrar. Al menos, no con sinceridad. Así que voy un poco a ciegas, descubriendo los baches con las caídas, que no son pocas ni leves: heridas, grietas, infecciones, fiebres, pinchazos, contracturas, tensión, estrés, lloros, crisis nerviosas… y hasta un cólico nefrítico.
La causa de mi estupor, la actividad a la que me estoy refiriendo es el apasionante asunto de la lactancia materna. El tema de dar la teta, vaya. Qué idílicas se ven las imágenes de tiernos bebés sorbiendo de los senos de sus madres sonrientes… Me pregunto si serán fotomontajes o actrices bajo los convenientes efectos de la morfina…
La primera en la frente: las críticas a tus melocotones… Esos montículos carnosos que hasta ahora sólo eran objetivo de miradas lascivas y causa legítima (y orgullosa) del incremento de la libido de esos maravillosos seres de tres patas, pasan a tener otra función… Ya no son peras, son mamas y su único fin es el de proporcionar comida. Así, están bien o no en la medida en que cumplan o no su razón de ser. Resulta que las mías no eran buenas. Hay que joderse, ¡qué chasco! Años escuchando que son manjares y era mentira. Pezones inservibles que desesperan al recién nacido que no acierta a sacar nada de ahí…
Una vez que empiezas a descubrir la realidad de la cosa del mamoneo, te lanzas a consultar diferentes fuentes y ya es cuando acabas de volverte loca del todo… La matrona te dice que intentes programar las tomas y el pediatra lo contrario, que a demanda. A la primera herida escuchas de todo: «un poco de la leche de ese mismo pecho ayudará a que cicatrice»; «el niño lo hace y el niño lo cura -con su propia saliva-«; «lo mejor es el Purelan»; «nada, nada… déjate de cremas, lo que tienes que hacer es meterte al bebé debajo del sobaco y meterle bien el pezón en la boca»; «un remedio infalible es envolverte las tetas en hojas frescas de col orgánica»; «déjate los pechos al descubierto y que se sequen al aire», «a mí me fue muy bien el jabón Lagarto», «que no, que no: el de glicerina, mano de santo» …Y así ¡hasta el infinito y más allá!
Pero las grietas no se curan. Y cada vez que llega la hora de que la criatura mame, me echo a temblar. Me lo engancho, diciéndome para mis adentros que soy como hay que ser, una madre sufrida y abnegada, con capacidad de sacrificio, pero veo las estrellas. El bebé me desolla los pezones mientras lloro como una condenada de puro dolor. Una hora después de que el niño me haya soltado todavía tengo pinchazos… y el bebé ya está pidiendo de nuevo.
«Esto son los primeros días, mujer», me decían al principio. «Las primeras dos semanas, que son muy duras», me dijeron al superar los siete días iniciales. «Mentalízate. Es que el primer mes es así, pero luego se pasa»… Así que me armo de valor y sigo adelante hasta que, para colmo, descubro que los llantos entre tomas de mi hijo no eran por gases, si no de pura hambre. Mi leche no le sacia, como descubro al primer biberón que le endosa su padre y que le deja tranquilo y feliz.
En esa insistencia a ultranza en la bondad de la leche materna, en ese afán por ocultar todos los problemas que acarrea y por convencerte de que sigas con la teta caiga quien caiga hay desinformación y fundamentalismo. El germen de la involución. Dar el pecho puede ser estupendo, pero también puede ser muy duro y e incluso llegar a ser esclavizante para la madre. Nadie habla de las ventajas del biberón que, entre otras cosas, permite al padre mayor participación en la crianza de bebé (alimentación incluida), que no tiene porqué ser exclusiva de las madres. Muchos de los hombres que conozco no quieren limitarse al antiguo rol de cabeza de familia. Compartir roles es la base de la igualdad de sexos, y estas nuevas corrientes tradicionalistas radicales pueden ser manejadas fácilmente por sectores contrarios.
im-perfectas.com 
Isa, yo estoy contigo. Todo el mundo te cuenta lo bueno y nadie lo malo, por mucho que leas y que te aconsejes, al final el instinto en lo que cuenta y lo más importante estar a gusto. Muchos aspectos de la maternidad están idealizados y lo digo con conocimiento de causa que estoy esperando al segundo.
Me gustaMe gusta
Anónimo, ponte un nick.
Tener grietas sangrantes y mastitis es una putada, duele un huevo y en la mayoría de los casos te incapacita para dar la teta o por lo menos para disfrutarla. Porque además tener grietas sangrantes y mastitis es PATOLÓGICO y lo que hay que hacer es solucionar el PROBLEMA y no aguantarse. La época de las madres sufridoras debería pasar a la historia.
Me gustaMe gusta
No he dicho que estés pidiendo ayuda. He dicho que la pediste y que cuando toda esa ayuda no te solucionó el problema sentiste que te ayudaban porque no te respetaban y porque eran unas fundamentalistas.
Existen circunstancias adversas, claro que sí. Por ejemplo que tu hijo pese un kilo es un pedazo de circunstancia adversa insoslayable. A lo que me refiero es a las circunstancias adversas que vienen de la falta de apoyo. Esas no son irresolubles y por eso son esas las que cohartan. Porque por ejemplo, yo no las tuve. Cuando nació mi hija la del kilo, una asesora de lactancia experta estuvo conmigo y no me dejó ir hasta asegurarse de que la lactancia iba a ser, no perfecta, pero al menos posible. Todo lo contrario cuando nació la mayor. Fuí víctima de un montón de circunstancias adversas que tenían una solución muy fácil.
Si alguien te llama egoísta por dejar de dar el pecho llena de grietas sangrantes y con una mastitis y un cólico nefrítico es porque no tiene ni idea de lactancia. Probablemente sea un fundamentalista, pero no de la teta, porque no sabe de lo que está hablando. Y por lo tanto, con dejar de escucharle el problema está resuelto.
Otra cosa es que tú sientas que alguien te está llamando egoísta y te está haciendo sentir culpable y mala madre porque te diga que te pongas hojas de col, dicen que son buenísimas para las ingurgitaciones. Tal vez lo haga de buena fe. Tus circunstancias personales sólo las conoces tú, tus condicionantes son tuyos. Y a eso me refiero cuando digo que hay que enfrentarse con el sentimiento de culpa. Sentirse egoísta o culpable cada vez que alguien dice que dar teta es buenísimo no tiene nada que ver con la lactancia en realidad, tiene más que ver contigo misma.
Me gustaMe gusta
Tan sólo una explicación más repecto a lo de los ANTICUERPOS. Está demostrado que ayuda:
INFECCIONES. La leche materna estimula el sistema inmune, posee agentes
(anticuerpos) que contribuyen a proteger a los lactantes de las bacterias y los virus. Los
bebés alimentados con leche materna son más capaces de combatir todo tipo de
infecciones:
• gastrointestinales,
• infecciones de vías respiratorias (como neumonías y bronquiolítis),
• infecciones de orina, otitis y diarrea.
Los lactantes amamantados durante más de tres meses sufren menos infecciones y éstas
son más leves. Algunos autores consideran el pecho materno como el órgano inmunitario
del bebé.
ENFERMEDADES CRÓNICAS DE LA INFANCIA. Los lactantes alimentados con
leche materna presentan índices más bajos de: celiaquía, cáncer, esclerosis múltiple,
artritis crónica juvenil, alergias, asmas, y dermatitis atópica.
DIABETES. Protege contra la diabetes tipo I, porque se retrasa la introducción de la
leche de vaca y sus derivados.
En los casos de predisposición genética a la diabetes, está mucho más indicada la
lactancia materna y hay que evitar los productos que contengan proteína de vaca hasta el
primer año de vida del bebé.
MENINGITIS. La capacidad de segregar anticuerpos específicos frente a las bacterias
del neumococo, meningococo, no se alcanza hasta el segundo año de vida. Por lo tanto,
la lactancia materna supone un aporte defensivo para luchar contra esta enfermedad.
MUERTE SÚBITA. Reduce también el riesgo de muerte súbita.
LEUCEMIA. Los niños cuyo período de lactancia supera los 6 meses, tienen menos
posibilidades de presentar leucemia aguda infantil, y linfomas. Los estudios lo han
relacionado con la presencia de la proteína alfa-lac en la leche materna. Esta proteína
induce a la reducción de células cancerígenas y células inmaduras y favorece el
crecimiento de las células ya maduras y estables.
EL DESARROLLO DE LOS DIENTES. El agarre del bebé al pecho, distinto al del
biberón favorece el adecuado desarrollo de la mandíbula y las demás estructuras de la
boca, evitando la necesidad de ortodoncias. También contribuye a la prevención de
caries dentales.
SISTEMA DIGESTIVO. La leche materna es más digestiva. Es rica en probióticos por
lo que la flora intestinal de los bebés amamantados presenta menos elementos patógenos.
La leche materna tiene mejor sabor que la leche de fórmula. Los alimentos ingeridos por
la madre modifican ligeramente su sabor, se cree que esto es la causa de que a los bebés
amamantados les cueste menos aceptar la alimentación complementaria.
Es mucho más habitual con la lactancia artificial que los bebés regurgiten.
OBESIDAD. Reduce el riesgo de obesidad infantil porque contiene leptina, hormona que
controla la obesidad en adultos. Está demostrado que cuanto más tiempo se dé de mamar
menor será el riesgo de padecer obesidad.
DESARROLLO CEREBRAL. Se asocia también a los niños lactantes un mayor
coeficiente intelectual debido a un mayor crecimiento y desarrollo cerebral.
MEJOR RESPUESTA FRENTE A LAS VACUNAS. Se ha comprobado que la
respuesta inmunitaria frente a las vacunas es mejor con los niños alimentados con leche
materna.
SALUD DEL ADULTO. Los adultos que fueron amamantados presentan niveles de
colesterol más bajos. Por el contrario, los que tomaron leche artificial presentan en la
edad adulta la tensión arterial, el peso, y el índice de masa corporal más elevado.
Pero claro, nuestros pezones agrietados y mastitis son más importantes… Como llamarías tú a eso??
Me gustaMe gusta
Sorprendente que conozcas el significado de «fundamentalismo» sin embargo parece que desconozcas el significado de «egoismo», que también viene en la RAE «Inmoderado y excesivo amor a sí mismo, que hace atender desmedidamente al propio interés, sin cuidarse del de los demás». Acaso tu hijo te ha dado su opinión al respecto??
Para terminar. Si no somos capaces de aceptar críticas negativas, o bueno, aquellas que no sean de nuestro agrado, no publiquemos nuestras ideas en una blog. Lo siento, pero sólo se justifican los culpables y tú intentas librarte de esta culpa. No esperes recibir sólo palmadas en la espalda de aprobación, que no todos somos iguales. Creo que aqui, aquellas que «no te han apoyado» el apoyo se le dieron a tu hijo, que al fin al cabo, también será nuestro futuro.
Me gustaMe gusta
Es que no estoy pidiendo ayuda, Irene. Ya pedí ayuda y no me sirvió. Estoy pidiendo respeto.
Las circunstancias adversas existen, por desgracia. Aquí todos hacemos lo que podemos y lo que nos da la gana a la vez… podría haber seguido sufriendo y dándole el pecho a mi bebé y he elegido no hacerlo. Libremente.
La presión social es que te hagan sentir culpable y mala madre por tomar esa decisión. Que te llamen egoísta. Es a esta gente que me ha presionado -y no a ti, Irene- a la que me refiero cuando hablo de fundamentalismo, que según la RAE no es nada bueno ('Exigencia intransigente de sometimiento a una doctrina o práctica establecida').
Me gustaMe gusta
Isa, que cada una haga lo que le de la gana sin circunstancias adversas. Si no, una no hace lo que le da la gana, hace lo que puede.
Besos.
Me gustaMe gusta
¿Y por qué crees que la gente que intenta ayudarte lo hace porque no te respeta? Es que no lo entiendo.
Arantxa:
¿Presión social? ¿Es presión social decir que la LM es mejor? ¿Es presión social que otra diga que ella lo logró?
Presión social es joderte el parto, llevarse el niño al nido, que te toque una enfermera que le da biberones, que la del ambulatorio te diga que hay que darle teta cada tres horas diez minutos en cada pecho, que te aseguren que las grietas son normales y que te tienes que aguantar, que al mes el pediatra que no usa las tablas de la OMS te diga que está bajo de peso y que tienes que complementar, que le metan alimentación complementaria a los cuatro meses, que a las 16 semanas tengas que volver a trabajar, que a los seis meses te digan que tu leche es agua y no le alimenta, que a los ocho te digan que eres una tercermundista, a los nueve que lo que tiene es vicio y a los diez que le vas a causar problemas «psicomotrices». Por no hablar de las lindezas que hay que oir cuando le salen los dientes o empieza a andar. Eso es presión social. Los estudios científicos y los médicos te dicen que hay que dar teta porque es buena y la sociedad te lo impide, una y otra vez.
Tal vez tú no lo veas, pero ese es nuestro punto en común, Arantxa.
En cuanto a la culpa, por experiencia propia sé que hasta que uno no se enfrenta a ella y la convierte en otra cosa, es posible que se diluya, pero no se va. Reaparece en cuanto que alguien saca un nuevo estudio hablando de los beneficios de la teta, cuando el niño tiene un moco o cuando el vecino que tomó más teta que el tuyo saca mejores notas en el colegio. Repito, lo digo por experiencia. Aunque claro, cada persona es un mundo y es posible que a vosotras no os pase, o tal vez sí.
Isa, nos has llamado fundamentalistas, lo que se agradece. Insisto en que talibana es discriminatorio, discrimina por ejemplo a los testigos de jehová (por poner un poner).
Lady A, muchas felicidades por tu empeño. Un beso grande.
Me gustaMe gusta
Vamos a ver si nos aclaramos: he tomado dos decisiones, las dos libremente y pensando en lo mejor para mí y para mi bebé. La primera fue dar el pecho, aunque sin saber a lo que me exponía y sin mucha información, sólo conocía las ventajas. La segunda decisión fue dejar la teta, movida por las circunstancias adversas, sí, pero no por eso menos libre.
El problema que yo planteo es que cuando una decide libremente dejar de dar el pecho surgen voces que acrecientan el sentimiento de culpa ante la ya de por sí difícil decisión. Voces como la de la anónima amante de la madre naturaleza que no tienen inconveniente en llamarte egoísta y en hacer proselitismo del martirio maternal.
Ojo, también conozco el caso contrario, el de una amiga que ha superado no pocas dificultades, ha decidido darle el pecho a su bebé a pesar de que apenas coge peso y tiene que lidiar con presiones constantes para que abandone.
Como bien dice TC, entre otros, lo que está claro es que la maternidad es un tema complejo, sensible, y muy personal en el que, por desgracia, todo el mundo se cree con derecho a opinar. Muchas veces haciendo daño.
En cuanto a la liberación de la mujer, ya expresé mi opinión en el post de Pablo, y creo que no tiene nada que ver con el tema que nos ocupa… Libertad de elección, amigas, que cada una haga lo que le de la gana…
Me gustaMe gusta
escribi un comentario y se me Borro! Grrr
Bueno, pues resumo: Que no te sientas mal por no dar el pecho, que es tu vida, y que nadie tiene derecho a criticar tus decisiones.
No te dejes apabullar por la presión social. Pasa de lo que diga la gente, que ellos no son los que estan sufriendo.
Estoy de acuerdo contigo en que nadie cuenta la parte menos bonita de la lactancia, pero eso tambien pasa con la maternidad en general. Nadie suele decirte que es algo bonito, pero tambien muy duro. La gente (la mayoria) se suele callar esas cosas porque no esta bien visto que te quejes, pero lo cierto es que la maternidad es muy dura.
Yo no tengo hijos, asi que esto lo digo desde fuera, imaginate si algún día consigo embarazarme los sapos y culebras que puedo llegar a soltar! jajaja.
En definitiva, que pases de la gente, y haz lo que te pida el cuerpo. No dejes que te hagan sentir mal!
Me gustaMe gusta
Querida Lady A, yo no cargo contra nadie en mi post… respeto todas las opciones y decisiones. Lo único que reivindico es mi derecho a ser respetada. No recuerdo haber usado el término talibana para referirme a nadie así que preferiría que no se usase par referirse a mi persona.
Me alegro por ti, y por las defensas que has podido transmitirle a tu descendencia.
Me gustaMe gusta
Hombre, yo entiendo lo que dice Isa en su post… pero, a mi, la que me parece una «talibana» es ella, porque arremete contra todas las madres que son pro-lactancia. Yo tampoco lo tuve fácil, me pasé días llorando por el dolor y sin que nadie encontrará el motivo. No se, seguramente para vosotras seré una tonta, abnegada y sufridora…Pero yo considero que mi leche era y es, el mejor regalo que le puedo dar a mi hija… y eso me compensa todo lo que he pasado…
Por cierto Isa, la inmunidad que proporciona la leche, no es para toda la vida, sino para los primeros meses, hasta que el bebe es capaz de desarrollar sus propias defensas….
Me gustaMe gusta
Irene, odríamos estar argumentando eternamente y no llegaríamos a un punto en común, puesto que nuestras posturas son claramente antagónicas.
Insito en lo de talibanes de la leche, me parece adecuado el término, al menos así lo viví yo. En cuanto me liberé de esas posturas vi la luz y mis criaturas también.
Sea como fuere, es su decisión, y su bebé está feliz. Incluso hay mujeres que optan por dar el pecho por la presión social, pero no están convencidas de que opción, luego tampoco serían libres. Creo que lo mejor es la alimentación materna, pero no a cualquier precio.
Aunque como tú bien dices no somos libres y lo de la liberación femenina es una quimera.
Me gustaMe gusta
No, la decisión no la ha tomado libremente. La ha tomado porque no le queda otra. Igual que yo no opté libremente a que me hicieran una innecesaria cuando nació mi primera hija, mi decisión libre fue que me atendiera ese ginecólogo, no que después decidiera que se tenía que ir a su casa. Libremente ha optado por dejar de sufrir y por supuesto eso es lo que hay que hacer, estar sufriendo es de idiotas. La cuestión es ¿qué circunstancias la han puesto en la tesitura de tener que decidir? Esa es la cuestión. Porque su decisión libre fue amamantar, como deciden el 90% de las mujeres que dan a luz, de las que un mísero 1% consigue amamantar más allá del año. ¿Por qué demonios te tiene que asolar «cierto sentimiento de culpa» en una decisión que se toma libremente? Eso es incompatible. Puede «asolarte» cierto sentimiento de pérdida, pero no de culpa. Son términos muy distintos. ¿Pecado? Creo que lees cosas que yo no he dicho. Por supuesto que es lo mejor para su hijo, el caso es que que no tenía porqué haber sido así. Esa es la diferencia. Y eso es lo que me vuelve una fundamentalista – que talibana, no, mujer, que no hay que discriminar ninguna religión 😉 Que nos creemos que somos libres cuando no es cierto. La liberación de la mujer es un timo.
Me gustaMe gusta
Irene, respetando profundamente tu postura, disiento de la misma de forma radical (de forma talibán tal vez, aunque los extremismos me aterran, con lo de la teta y para todo en la vida).
Isa ha optado por lo que es lo mejor para su hijo y para ella como mamá, con el apoyo del padre de la criatura.
Creo que no hemos leído el mismo post. Lo escribe una mujer adulta, que adora a su hijo y que ha tomado una decisión, libremente. No se trata de eximirla de su sentimiento de culpa, porque creo que no está buscando la absolución de su «pecado». Está tranquila con su hijo y su decisión. Aún la asola cierto sentimiento de culpa, pero después de leer que son muchas las que no lo lograron y de saber que la presión social es tan terrible que hay quien dice haberlo logrado durante meses, para confesar que no lo consiguió nunca, seguro que esos posos de culpa se van.
Yo no me siento una fracasada de la teta. No pude, apenas dos meses con mi segundo bebé. Se intenta y si no se puede no es el apocalipsis. Las talibanes de la leche me hicieron mucho daño y las aparté, porque mi equilibrio emocional se resentía. Encontré apoyos e información, y la lógica se impuso. En otros casos la lógica es diferente.
En cuanto al tema de los medicamentos, muchos de ellos no son compatibles con la lactancia. No se trata de una prohibición total, pero los estudios realizados no pueden demostrar que sean 100% seguros (www.e-lactancia.org).
Me alegró mucho de que tú lo lograras, porque el crecimiento intrauterino retardado es un problema serio, pero incluso en ese caso hay mamás que no lo han logrado y sus hijos están sanos.
Besos a todas. Sois la leche.
Me gustaMe gusta
Coño y ahora sale dos veces. Borra el que quieras 🙂
Besotes gordos, de verdad.
Me gustaMe gusta
Ainz, te había escrito un comentario larguísimo y se me borró :(.
Te deseo toda la suerte del mundo, desde el cariño de una madre que fracasó y fracasa en muchos aspectos de la maternidad. Aunque sea una fundamentalista de la teta, créeme que te comprendo. No es por tu culpa. Dar el pecho en la vida moderna es todo un logro, ese es uno de los precios que las mujeres hemos tenido que pagar por liberarnos. Me considero a mí misma fundamentalista de la teta – talibana no, que no me gusta discriminar a nadie – no porque considere que hay que dar teta contra viento y marea, sino por todo lo contrario: porque creo que dar el pecho es un derecho, de las madres y de los niños, dar el pecho y disfrutarlo y el estado actual de las cosas hace que casi ninguna tengamos opciones. Quiero decirte que las que lo logramos no tuvimos tanto mérito, simplemente contamos que una gran dósis de suerte que nos trajo el apoyo que necesitábamos. Lamento si alguna de mis palabras de ha herido, el medio escrito tiene muchas limitaciones, al menos para mí y probablemente me extralimito a veces, pero es básicamente porque yo siento tanto agradecimiento hacia las personas que me ayudaron a mí (mi segunda lactancia fue complicadísima, mi hija peso un kilo al nacer y si no hubiera sido por los profesionales que me atendieron no hubiera superado sobre todo la inseguridad que implica relactar a un prematuro) que supongo que a veces sueno muy vehemente. Como te digo, no es por tu culpa, tú no eres responsable de tus circunstancias y nuestras circunstancias en la actualidad no suelen acompañar.
Dar la teta tendría que ser así
http://www.sermamas.es/postparto/lactancia/por-mi-culpa/
Y no es así casi nunca. Vuelvo a decirlo, lo que más me preocupa de estas situaciones no es el hecho de que se pierda una lactancia, ahora mismo no es una tragedia, sino que se deje a las mujeres con esas sensaciones de incapacidad y de culpa. Ni eres incapaz ni eres culpable, la culpa conlleva una intención de herir. No es tu caso. No es tu culpa.
Es que me preocupa muchísimo, de verdad. Porque además creo que nos divide en dos bandos ficticios, a los que nos unimos incoscientemente, de una forma visceral, insuperable. Y eso es malo para todas nosotras, como género.
La culpa es muy útil al sistema. Nos mantiene alienadas, peleando entre nosotras. Quítatela. Las coasas te han salido así. Yo tengo dos cesáreas. La de más allá no quiere dejar a su hijo en la guardería a las 16 semanas. Así estamos todas, todas sintiéndonos culpables por cualquier cosa.
Disfruta de tu maternidad y para cualquier cosa ando por ahí.
Un beso grande y suerte.
Me gustaMe gusta
Soy Rosana, aunque me dinen 'anónimo'
La verdad es que hay madres a las que les duele siempre, a otras sólo los primeros días; otras que tienen grietas, otras que ninguna; algunas mastitis, incluso ciertas de ellas que se tienen que someter a una operación quirúrgica tras la infección. ¡¡¡¡CADA TETA ES UN MUNDO!!! Dicho esto: cada cual que haga lo que le parezca. Eso sí, que haya más información si realmente falta.
Muas
Me gustaMe gusta
¡La leche! (nunca mejor dicho) ¡¡qué de comentarios!! 🙂
Lo primero, aclarar que dejo al margen de toda crítica a mi matrona, un ser excepcional donde los haya en el que sólo he encontrado profesionalidad, comprensión y cariño.
Muchas gracias a todos por vuestros ánimos y apoyos, siempre vienen bien. Como han dicho ya un par de amigas lectoras, ninguno de los consejos que me dais me resultan novedosos (aunque los agradezco igual)… ¡Lo probé todo!
La decisión ya está tomada, y aunque estoy intentando no sentirme culpable por haber dejado de darle el pecho a mi hijo, no es fácil.
No penséis que estoy en desacuerdo con la máxima que acredita que la leche materna es lo mejor que hay (y gratis, como dice Juana)… ¡Dios me libre de contradecir a la OMS! Eso sí, que nadie pretenda hacerme creer que gracias a mamar de la teta te quedas inmunizado de por vida, como si estuviéramos dentro del anuncio de Actimel. Con cuentos a otra… También es muy sano vivir en el campo y alimentarse de productos cultivados por uno mismo. O no… quién sabe.
La naturaleza será muy sabia, pero como me recordó ayer mi mejor amigo: ahí están las setas venenosas para que se las coman los incautos que están contra los adelantos científicos y el progreso.
Ser fundamentalista nunca es bueno (http://buscon.rae.es/draeI/SrvltGUIBusUsual?LEMA=fundamentalismo).
Hay que saber diferenciar entre ayudar a alguien que lo precisa con consejos y adoctrinar o amedrentar a quién ya ha tomado una decisión (sea la que sea). La semana pasada -además de una mastitis severa- tuve un cólico nefrítico, que conlleva uno de los dolores más intensos que se puedan experimentar. Pues bien, en mitad de la desesperación, mi farmacéutica se negó a venderme la medicina que me habían prescrito por entender que era incompatible con la lactancia, a pesar de haberle manifestado abiertamente mi decisión de abandonarla. Eso es fundamentalismo.
Por supuesto que cada mujer es un mundo, y hay que vivir y dejar vivir.
Me gustaMe gusta
Pues yo sinceramente y después de leeros, creo que de lo que se trata es de buscar ayuda y de reivindicar que todas las mujeres la reciban. Es que no entiendo ese complejo de culpa, y es algo que me jode bastante. A las mujeres se nos ponen trabas para todo, todo son obstáculos, en la actualidad incluso en esos ámbitos que antes eran «esencialmente femeninos». Luego fracasamos, se nos queda cara de tontas y nos dedicamos a soltar improperios sobre las que tuvieron más suerte o más apoyo, en lugar de cabrearnos con el que nos puso la valla.
El problema no es la decisión dar teta/dar biberón. El problema es que la mayoría de las veces las que optan por el biberón lo hacen tras una lucha sin cuartel y sin ayuda, con sentimiento de derrota, de incapacidad y de culpa. Si fuera una decisión libre y consciente nadie os haría sentiros culpables. Pero obviamente no lo es en la mayor parte de los casos.
Soy mujer y me molesta que esto suceda. Que sea madre lactante no tiene nada que ver, es puro sentimiento de «clase» o de género. Como lo queráis llamar.
Me gustaMe gusta
mis 2 niños mamaron hasta los 18 meses. Ni una grieta. Ni un dolor. y los 2 muy sanos. No sientes catedra de lo que cuentas, supongo que cada mujer es un mundo. La lactancia no tiene porque ser sufrida. Quien dijo que criar a niños era coser y cantar?
Me gustaMe gusta
Ufff tema controvertido!! Mis conocimientos de la lactancia se limitan a una posición indirecta pero he visto todos los casos que comentáis, desde mi punto de vista se trata de valorar los pros y los contras de cada caso concreto y mi conclusión es que los niños salen igual de sanos y mofletudos sea lo que sea que decidas o te veas obligada a hacer, lo de los anticuerpos es el argumento con mayor peso, pero al final por mucha teta que haya de por medio en la guardería acaban pillandolo todo, y nadie ha dicho nada de lo caro que resulta el biberón que no todo son ventajas.
Juana
Me gustaMe gusta
Ay,Isa, imagino por lo que estás pasando. Si me permites te voy a contar mi experiencia en pocas palabras. Tengo 2 hijos, una de 17 y uno de 10.
A la primera no llegó a los 2 meses el tiempo en que le dí de mamar ( por todo eso que tú cuentas y más).
Al segundo le dí de mamar 2 AÑOS y lo dejamos porque tuve que empezar a tomar un tratamiento que no era compatible con la lactancia.
Los dos son unos chicos estupendos y sanos, a no ser por la alergia QUE TIENEN LOS DOS a pesar de lo diferente de su lactancia.
No te voy a negar que es una experiencia maravillosa, pero también lo son otras que vais a compartir toda la vida.
Lo mejor es que estés bien para poder disfrutar de estos momentos que no van a volver, así que no te coman el coco, sólo tú sabes cómo estás y cómo está tu bebé. Seguro que con ayuda de tu pareja podéis tomar la mejor decisión.
Espero que mis palabras te sirvan de algo. Ánimo y…
Besinos.
Me gustaMe gusta
Pues yo pienso que debes tomar una decisión que sea coherente contigo misma. Isa, los consejos están muy bien y dejan muy agusto a quien los da, pero nadie mejor que tú para saber tu situación. Soy madre y si de algo estoy orgullosa es de vivir mi maternidad tal y como esperaba e incluso mejor de lo que esperaba. Disfruta de tu bebé y él disfrutará contigo 🙂 ánimo sea cual sea tu decisión.
Me gustaMe gusta
Mamá pediatra, ya sabes que tú eres de las excepciones que confirman la regla, eso hay que reconocerlo. Pero es obvio que Isa no ha tenido la suerte de dar con un profesional como tú. A pesar de todo sí que creo que las que más saben de lactancia son las madres lactantes. La teoría está muy bien, pero de la teoría a la práctica hay un trecho. Por eso, que busque un grupo. Deberían costearlos en la seguridad social. Si después no lo consigue al menos no le quedará la cosa de la culpa, que viene precisamente porque otras lo hacen. Estar dando teta sufriendo es una tontería. Lo malo de eso es que en lugar de arreglar el problema se tire de biberón y se deje a la mujer con un sentimiento de incapacidad y eso, de culpa.
Saludos
Saludos
Me gustaMe gusta
Estoy de acuerdo en que la información que hay respecto a la lactancia y a muchas otras cosas que rodean el criar un hijo es insuficiente, muchas veces sesgada e incluso contradictoria. No nos lo ponen fácil, cada uno te dice una cosa y la final, como ya han comentado, hay que hacer lo que te pida el instinto, muchas veces más sabio que cualquier enciclopedia. Eso es lo que has hecho y bien hecho está.
Por otra parte, estoy profundamente en desacuerdo en que una buena madre debe dejarse la vida por dar el pecho porque es “lo mejor” . Me parece un extremo insostenible en la sociedad en la que vivimos. La que lo quiera hacer como opción, genial, pero tildar de peores madres a quienes no están dispuestas me parece el colmo de la ignorancia. Dar a entender que para ser una buena madre hay que ser una buena sufridora me suena como del siglo pasado, la verdad. Respeto a quienes lo hacen, pero no comparto esa necesidad ni la creencia de que es “lo mejor”. Lo mejor siempre depende de las circunstancias, diferentes en cada caso.
Dicho lo anterior, he de añadir que yo he tenido dos lactancias muy satisfactorias y sin grandes sufrimientos, que nadie piense que estas opiniones son fruto del “despecho” ni de la frustración. Para mi es puro sentido común.
Me gustaMe gusta
Todo esto lo tengo tb muy reciente.
Casi llegué a la depresión pq mi niño TENÍA HAMBRE.
…q se dice pronto….
Solo digo q a las defensoras de la 'tetada', esas q acabarían con las tetinas y chupetes, a esas les daba pal'pelo!
Me gustaMe gusta
Hola Isa,
Te comprendo perfectamente tanto como pediatra que atiende a muchas madres que llegan a las consultas desesperadas como también como madre que tuvo dos lactancias bastante dificultosas (a pesar de los conocimientos que tenía y que según algunas personas los profesionales no tenemos por definición).
Ciertamente las grietas se producen por una mala postura y se suelen poder corregir. También es cierto que todo tipo de pezones son capaces de lactar aunque sí hay anatomías que lo ponen más difícil y bebés que no son tan avispados como otros. Las diferencias existen y de la misma manera que hay mujeres que lo tiene muy fácil y muy cómodo, hay otras que no.
Los sentimientos de culpa son compañeros de viaje de toda maternidad que se precie, aunque habría que intentar minimizarlos. Y disfrutar del bebé sea como sea la forma en que finalmente decidas alimentarlo.
Un saludo
Me gustaMe gusta
No puedo decirte nada que no te hayan dicho…Yo les di pecho a los dos, y con muchísimo sufrimiento, y al final,tuve que optar también por la lactancia mixta… Para mi forma de ver las cosas, el comentario de Angelito es muyyyy bueno!!!! Un beso y disfruta muchísimo del bebe!!!
Me gustaMe gusta
Bueno Isa, no creo que pueda contarte nada que no hayas leido, ni que te hayan recomendado, ni pediatras, ni matronas, ni madres ni suegras ni amigas.
Únicamente una cosa, dejate llevar por tu instinto, que es el mejor, y disfruta de tu bebe y tu-su lactancia como a ti te de la gana.
Me gustaMe gusta
Isa, yo creo que hay que intentarlo, y en eso tu ya lo has hecho, pero creo que hay una cosa más importante que la leche para transmitir a tu bebé y eso es tu estado de ánimo. Si el dar el pecho te produce semejante sufrimiento, con sinceridad creo que lo mejor es que tome el biberón, que no le va a pasar nada de nada y va a crecer sano y feliz.
Te comprendo en muchos aspectos, pues nunca en mi vida recibí información tan contradictoria como en el tema de la lactancia materna: que si hay que darles a demanda, que si cada no se cuantas horas, que hay que cambiarles de pecho cada vez, , que no.. en fin.. y si pasa de los 6 meses con la lactancia, la cosa se recrucede aun más: pediatras diciendote que por qué les sigues dando y que alimentación complementaria ya, otros que sigas con el pecho casi hasta el infinito… en fin que te acaban volviendo LOCA, y solo deseas que te den una solución válida que sirva para ti.
Como con todo en la vida nunca se puede contentar a todo el mundo, pero a ti eso te debe dar igual, busca sentirte lo más feliz posible con tu niño y eso sin duda también a él le dará una mayor felicidad.
En fin guapa, disfruta de tu niño con biberón o sin él que los días pasan volando !!!
Me gustaMe gusta
Pues nada, ya esta, es mejor que tu hijo tenga a su lado una mami tranquila, que una madre «dolorida», yo me jarte a llorar en la consulta del medico cuando le dije que habia tenido que ir a urguencias y me habian recomendado dejar la lactancia, su respuesta: lo que te acabo de decir. Madres tranquilas, niños tranquilos.
Besotes y a disfrutar de tu bebe que es lo que toca, no a sufrir.
Me gustaMe gusta
LA NATURALEZA ES SABIA. SI NO FUÉRAMOS CAPACES DE AMAMANTAR, LA RAZA HUMANA SE HABRÍA EXTINGUIDO.
Mi hija nació hace ya 8 meses. Sigue alimentándose con mi leche. Y no creo que se una de esas «con suerte». Probablemente se trate más de cabezonería, perseverancia y persistencia. Cuando me empeñé en seguir dando el pecho, no fue, desde luego, por el «qué dirán», sino por algo mucho más importande y que nadie hasta ahora ha mencionado: LA SALUD DE MI HIJA. Sí señores, no niego que en el mecado dispongamos de un sinfin de marcas de leche artificial, hecha en laboratorio a la imagen y semejanza de la leche materna. No os equivoqueis. Nada podrá imitar a lo que ya de por sí ha sido creado por la propia naturaleza. La leche artificial es casi igual de buena en cuanto a todos los elementos alimenticios, pero carece de algo fundamental, de algo que convierte a la leche materna en excepcional: LOS ANTICUERPOS. Esos bichitos, que desarrollamos cada vez que enfermamos y que nos protejen frente a las infecciones posteriores, los entregamos a nuestro hijo, de tal forma que le protege a él también… Eso la leche artificial no te lo ofrece, a que no??
Y aquí me veis, pasados 8 meses sigo dando a demanda, alternando con los sólidos. Lo pasé «mal» como todas y cada una de nosotras. Con grietas, con mastitis, sin vida personal y menos aún privada, alimentándo a mi hija cada 2 horas… Hasta hora sigue sin un solo catarro, ni un moquillo, sin diarreas, sin problemas, es felíz y sana y eso es lo que importa. Dejádos de tópicos, que si la libertad, que si no puedo, que si tengo mala leche, que si no alimenta bien. No convirtais la defensa de la lactancia natural en una guerra de sexos, sino tomadlo como una lucha por la salud de nuestros hijos. Tampoco os dejeis llevar por esos tópicos de que «la lactancia es un momento maravilloso». La lactancia materna es eso: la lactancia materna.
Yo, y creo que seré la única «machista» te APOYO A QUE NO TE RINDAS y que pienses en la salud de tu hijo y no en tu propio bienesar.. Eso sería un acto un tanto egoista, ¿no crees..? Te digo un par de trucos, que a mi me ayudaron:
1º Cómprate unas pezoneras, y úsalas hasta que hasta que sanen tus pezones. El problema es que la saliva del bebe reblandece el pezón cuando se queda mucho tiempo mamando. Entonces aparecen las grietas. La pezonera te aliviará y el bebé aprenderá a engancharse mejor.
2º Cómprate un saca leches ELECTRICO. Estimula el pecho constantemente sacándote leche, que podrás utilizar más adelante, cuando tengas que ausentarte. Eso ayudará a producir mucho más leche, de tal forma que tu hijo se saciará mucho antes, por lo tanto no tendrá que chupar tanto.
3º «Engáña al niño» (a mi eso me funcionó de maravilla)- Sácate un poco de leche de uno de los pechos justo antes de la toma. Ofrécele primero ese pecho y cuando lo vacíe, ofrécele el otro. Cual es el truco? Pues que la estructura de la leche va cambiando según el bebe va descargando. Primero la leche está rica en agua y al final en muuuuuucha grasa, que es lo que le sacia. De esta manera, te aseguras de que se ha tomado primero esa parte rica en grasas, a la que probalemente no llegue nunca, porque se cansa antes o porque le cambias de pecho por el dolor que sientes, por lo que el niño SIGUE CON HAMBRE.
Antes de rendirte, pon a prueba durante unos días mis consejos… A mi me funcionó.
Mi hija nació con 2600KG y 46cm, en el percentil 3. Ahora está en el percentil 50 y sobre todo SANA.
Un saludo.
Me gustaMe gusta
Mucho ánimo y te comprendo perfectamente. Mi primer mes con el niño fue de lágrimas constantes y ni mi hija ni yo disfrutabamos la una de la otra. A mi la matrona me dijo que lo importante es que las dos estuvieramos bien y que estuviera agradecida de que mi hija había nacido en un pais donde tenia alternativas (bibe), así que me relaje y pasamos al bibe y la verdad es que no me arrepiento en absoluto. Trata de superar la culpabilidad (que cuesta, lo se) y disfruta a tope de tu nene, que crecen super rápido
Rocío
Me gustaMe gusta
Mucho ánimo. Yo te comprendo perfectamente, es muy duro cuando las cosas van mal y pienso, con franqueza, que hay situaciones en las que lo mejor es tirar la toalla. Si has tomado ya la decisión, no te sientas culpable ni dejes que te hagan sentir culpable.
Me gustaMe gusta
Las fundamentalistas de la teta no acusan a las madres que no consiguen dar el pecho de ser malas madres. A quién acusan es al sistema, que no ayuda a las madres con dificultades a la hroa de dar el pecho y las dejan solas y desamparadas con su tremendo sentimiento de culpa, muchas veces encima achacando a defectos en la mujer lo que en realidad está producido por falta de conocimientos de los profesionales de la salud, que son los que deberían solucionar los problemas. Problemas con la teta puede haber muchos, pero casi todos tienen solución. Siempre que des con el que sabe. Como te he dicho, busca un grupo de apoyo de fundamentalistas de la teta, que saben un montón y si no lo consigues al menos te habrás quitado el sentimiento de culpa y eso que dices de tus pezones. Francamente me ha puesto los pelos de punta que te hayan dicho una cosa así. Eso sí que es misoginia.
Besos.
Me gustaMe gusta
Hoy dia es posible que si supiera donde buscar informacion pero en su dia me senti totalmente sola y sin ninguna ayuda. Resultado??un mes duro la lactancia.
Animo guapa estas tenieno muchisimas paciencia y estas siendo muy fuerte. Yo abandone antes.
Un abrazo.
Me gustaMe gusta
Es una pena que no nos ayuden más en el tema, yo nunca tuve problema, soy una vaca lechera,y las tres niñas unas glotonas, pero sufrí las grietas con la mediana y las curé con una crema y las pezoneras esas mágicas de silicona y muchas lágrimas, cada vez que se acercaba la niña a la teta ya me dolia…pero fuí descubriendo por mi misma las curas, nadie me dijo como hacerlo y lo poco que me decían no me servía para nada.
Una amiga, con su bebé de cuatro meses, entre toma y toma de pecho, lloraba desconsolada, le dijeron de un principio que eran gases…pero no era el frenillo de la lengua, no le dejaba chupar bien y la niña pasaba hambre porque chupaba muy despacio, pero ya tenía casi tres meses cuando lo descubrieron…
Así que ánimos
Me gustaMe gusta
El pediatra te ha dicho que a demanda? Con la poca idea que tienen estos de lactancia? (modo irónico on, por supuesto)… 😉
En fin, con mi primer hijo fue idílico esto de la teta, pero con el segundo estuve como tú más o menos (sin grietas, pero tuvimos otros problemillas de hambre y nervios) y te aseguro que fue un alivio dejar el pecho… Tanto para el niño como para la madre. Fue un mes horroroso y, en cuanto se pasó la tormenta y empezaron los biberones, empezamos a disfrutar el uno del otro… Me dio pena por eso de que es lo mejor y tal, vale, pero chica, sabiduría popular dixit: «mamá tranquila = bebé feliz» 🙂
Me gustaMe gusta
No entiendo las que defienden la lactancia a ultranza. Los radicalismos nunca son buenos. En estos casos el criterio que debería predominar es lo que mejor se adapte a la madre y fundamentalmente al niño.
Cada persona es un mundo y lo que vale para una, no tiene que valer para otras. Es verdad que hay mucho «experto» y que la gente, con la mejor voluntad del mundo, opina y da consejos. Pero lo realmente importante es lo que a ti te haga sentir bien. Y lo que piensen los demás, está de más…
Sin olvidar, la agradable sensación para el padre de poder compartir la alimentación del niño.
Si yo fuera padre, estaría encantado de darle el biberón a mi hijo, pero sobre todo de ver a mi pareja feliz…
Me gustaMe gusta
Isa yo nosotros también pasamos las de caín con eñ tema lacatancia, y digo nosotros porque aunque obviamente es una servidora quién las pasa y disculpad mi vocabulario «putas» tú marido y tu baby tb. El primero por sentirse impotente, preocupado y sufrir el insomnio obligado porque claro el hambre que pasa tu peque,se convierte en una espiral de: no como, lloros sin cesar, no duermo….Así que con este fenomenal panorama mi paso por la lactancia materna no duro más de 20 dias.Porque además y para más inri Inés fue prematura y potaba todo lo que ingeria´, supongo que de los nervios que le tranmitia yo. Tengo que darle las gracias al santo de mi pediatra que me transmitio tranquilidad y me comentó que la lactancia materna debia ser algo placentero y feliz y que sino bibe que alimentaba de lo lindo. Y efectivamente aqui esta Inés con sus 15 kilitos de nada a base de sus buenos platos de lentejitas…Isa que no me entere que sufres eh!!
Arriba la liga del biberón!!
Me gustaMe gusta
Animo Isa! Yo alimenté a mis tres niños con biberón y disfrute lo mismo y además disfrutó su padre también con la lactancia. Haz lo que te pida el cuerpo.Si tu te sientes bien, tú bebé se sentirá bien.
Besos
Me gustaMe gusta
No creo que debas sentirte culpable. Es como si yo tuviera remordimientos por escribirte de este modo en lugar de hacerlo de puño y letra y pasar por la oficina de Correos. Acaso utilizar la tecnología me convierte en peor amiga? Y por qué ibas a ser peor madre por servirte de años de investigación en materiales y diseños para las tetinas de los biberones y aparatos saca leches? No soy madre, pero creo que si fuera tan imprescindible amamantar, no se habrían desarrollado tantísimas alternativas a dar el pecho.
Me gustaMe gusta
Te comprendo perfectamente, pasé por tu misma situación, incluso por una mastitis. Cuando algo que se supone que tiene que ser una experiencia maravillosa produce tanto dolor (como has señalado, físico y mental) no merece la pena. No estoy ni a favor ni en contra de la lactancia materna, el problema es que últimamente las posturas a favor se han radicalizado en exceso y si osas dar un biberón a tu hijo eres tachada de mala madre.
Cada persona debe actuar como se lo dicta su conciencia y su cuerpo y debe hacer lo que cree que es mejor para su bebé.
Así que «olé» y adelante.
Me gustaMe gusta
Ays…, ánimo Isa, que esto es como todo lo que viene ahora en adelante con tu niño; lo importante no es que las cosas salgan como esperamos, si no saber salir adelante aún no saliendo las cosas como esperamos.
Saludos y enhorabuena por el retoño.
Me gustaMe gusta
Ánimo con el biberón ¿Donde está escrito que hay que ser una madre sufrida? En esta sociedad tan machista…
Me gustaMe gusta
Que te voy a decir que no hayas descubierto ya… pues si, el problema radica o en falta de información o en demasiada información de personas que no están informadas. Tengo dos hijas y a ninguna pude dale el pecho por las mismas razones que tú das, con la primera lo pasé peor, supongo que por ser primeriza, pasé mucho dolor, tanto físico como emocional. Con mi segunda hija fue diferente, comenté lo que me ocurrió y ni aún así me ayudaron a que esta vez pudiera darle el pecho.
Sólo te puedo decir que no te sientas culpable, no lo somos, lo que si somos es victimas de la mala información y la poca ayuda.
Un saludo
Me gustaMe gusta
¡Pero que razón tienes Isabel! Gema y yo entendemos perfectamente por lo que estás pasando y ya sabes por qué. Desde que empezamos a dar el biberón a Mario nuestra vida mejoró muchisimo, no solo porque yo pude participar más en la alimentación de Mario, sino porque a partir de ese momento mi mujer y mi hijo fueron mucho más felices. La decisión de dar o no el pecho es complicada y depende de muchos factores, pero tienes toda la razón en que hay una corriente fundamentalista que no os deja decidir con libertad. Un beso muy fuerte a los tres y me alegro de que hayas tomado una decisión que va a mejorar mucho vuestra vida. Olvidate de la culpa y la sensación de no soy una buena madre que algunos te haran sentir, ser una buena madre se demuestra en muchas otras cosas más importantes que esta.
Me gustaMe gusta
Hola. Lo primero de todo es que no hay que sentirse culpable. Los fracasos en la lactancia se producen porque los profesionales de la salud no tienen ni idea de lactancia materna, no porque los pezones sean inservibles ni porque tú lo estés haciendo todo mal. Dicho esto, si tienes grietas es porque el bebé no se engancha bien, lo que no tiene nada que ver con el pezón, sino con la forma en la que abre la boca. Si te interesa busca un grupo de apoyo que te enseñe a corregir la postura del niño. Hay grupos de apoyo en muchas ciudades de España y créeme, saben más que muchos pediatras. Si te interesa. La lactancia no tiene que doler y mucho menos hacer grietas y si alguien te dice lo contrario es precisamente porque no tiene ni idea de lactancia. Si las mujeres con pezones planos o invertidos no pudieran lactar hace mucho tiempo que ese gen se habría perdido por incompatibilidad con la vida. Si es que es ese tu problema.
Saludos
Me gustaMe gusta
Creo que sí hay información, pero no es tan obvia, hay que buscarla. Yo también la encontré tarde y no cuando la hubiera necesitado. Te comprendo en todo lo que cuentas. Mi hijo también paso un poco de hambre e iniciamos la lactancia mixta.Cuando tomó el primer biberón lloré al ver como lo engullía de hambre… Después de unas semanas el pediatra me dijo que podía volver a la teta solo, pero yo no tenía fuerzas, estaba destrozada…Asi que seguimos con la teta+biberón.
Seguro que este post tendrá muchisimos comentarios. Yo no sé bien que decirte. Es verdad que la matrona te dice A, el pediatra B, la suegra C…Haz lo que consideres mejor para vosotros, y sobre todo disfruta de tu bebé. hay muchas formas de dar amor, por supuesto no solo con la teta, como a veces nos dan a entender. ANIMO!
Me gustaMe gusta